Celina y German llegaron a nosotros con muchos miedos, estábamos en en plena ola de COVID y no sabíamos que limitaciones íbamos a tener, pero por suerte los casos disminuyeron y se pudo realizar la boda como ellos la habían soñado. Unos días antes de la misma, realizamos la sesión preboda por la zona de Pocito y terminamos en la Quinta La Pintad que muy amablemente nos dejaron usar sus instalaciones para realizar algunas tomas ahí. El día da la boda fue muy intenso, empezamos en unas cabañas con German, su padre y unos amigos, mientras Celina estaba en su casa rodeada de su familia. El maquillaje estuvo a cargo de Mariana Rachid y el peinado fue realizado por Carlos Linares. La ceremonia religiosa fue en la basílica de Desamparados y ya de ahí fuimos a Quinta Nazareno, donde contamos con la gran organización de Marianela Estevez y su gente
